Croquetas de pollo asado

Estas ricas croquetas caseras de pollo asado están de muerte! El sabor tan rico que le da el pollo asado a la masa de las croquetas hace que merezca la pena hacerla y eso que hacía bastante tiempo que no las hacía de este modo. Para hacerlas hay que tener suficiente tiempo, paciencia y unas ganas feroz de comerte unas deliciosas croquetas caseras!!! Como me sobraron para otra vez, las tengo en una bolsa hermética en el congelador pero os puedo asegurar que no van a durar tanto allí.

Las acompaño con unos bastones de berenjenas fritas y una riquísima ensalada, así se cena de lujo verdad??

Ingredientes:

600 ml. de leche desnatada.
2 cucharadas soperas de harina común.
Un muslo y una pechuga de un pollo asado.
Una cebolla.
Aceite de oliva.
Sal y pimienta.

Elaboración:

En una sarten con un buen chorrito de aceite de oliva sofreímos la cebolla picada.

Cuando la cebolla esté blanda y transparente añadimos el pollo asado bien picado.

Cuando veamos que están todos los ingredientes listos, añadimos las cucharadas de harina y removemos bien.

Dejamos que la harina coja color, salpimentamos y empezará la harina a integrarse con los demás ingredientes.

Agregamos la leche, rectificamos de sal si es necesario y no paramos de remover a fuego medio. En este proceso hay que tener paciencia porque la masa espesa lentamente y hay que tener cuidado para que no se pegue en el fondo.

Veremos que la masa va espesando lentamente y no dejamos de remover. La masa se irá despegando de las paredes y del fondo de la sartén. Cuando veamos que empieza a espesar, que el manejo es más fácil y que al moverla no se pega es cuando estará lista.

Vertemos la masa en un fuente, lo dejamos enfriar y le ponemos por encima papel film.

Cuando la masa estén completamente fría y de fácil manejo, haremos las formas de las croquetas y las pasaremos por huevo batido y pan rallado. Este proceso no lo he puesto por que era yo la que hacía las fotos y sinceramente era nulo hacer una foto.

Freímos las croquetas de pollo asado en abundante aceite caliente y las dejamos escurrir en papel absorbente de cocina.

Aquí las tenéis, están riquísimas!!!